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CAMBRIDGE YOUNG LEARNERS: EL PRIMER GRAN PASO PARA QUE LOS NIÑOS APRENDAN INGLÉS CON CONFIANZA

Aprender inglés desde pequeños se ha convertido en una de las mejores decisiones que podemos tomar como familias. No solo por las oportunidades académicas y laborales que ofrece en el futuro, sino también porque cuanto antes se empieza, más natural se vuelve el idioma. Los niños tienen una capacidad asombrosa para absorber nuevos sonidos, estructuras y vocabulario sin apenas darse cuenta. Aprovechar esa etapa de aprendizaje es una gran ventaja.

En el mundo globalizado en el que vivimos, dominar el inglés ya no es solo una opción. Es una necesidad. Y si queremos que nuestros hijos lo dominen con soltura, lo ideal es ofrecerles un camino que sea a la vez sólido y motivador. Ahí es donde entran en juego los exámenes Cambridge English Young Learners, también conocidos como YLE.

¿Qué son los exámenes Cambridge Young Learners?

Los exámenes YLE son una serie de pruebas de inglés diseñadas específicamente para niños entre los 7 y los 12 años. Están creados por la prestigiosa Universidad de Cambridge, una de las instituciones educativas más reconocidas del mundo. Su objetivo no es evaluar como si fuera un examen tradicional, sino animar a los más pequeños a aprender, progresar y, sobre todo, disfrutar del inglés.

Estos exámenes se dividen en tres niveles progresivos: Starters, Movers y Flyers. Cada uno está adaptado al nivel de desarrollo y madurez del niño, tanto en conocimientos lingüísticos como en habilidades cognitivas.

Lo más interesante es que no hay aprobado ni suspenso. Todos los niños reciben un certificado con un número de escudos (hasta un máximo de cinco por destreza: Reading, Writing, Listening y Speaking) que reflejan su conocimiento. Esto refuerza la autoestima y fomenta una actitud positiva hacia el aprendizaje del inglés desde el principio.

Conociendo los tres niveles: Starters, Movers y Flyers

Una de las grandes ventajas de los exámenes Cambridge Young Learners es que están perfectamente escalonados. Cada nivel representa un paso en el camino del aprendizaje del inglés, de forma que los niños avanzan con seguridad y sin saltos bruscos. 

Starters

Es el primer nivel de los exámenes YLE y está pensado para niños que están empezando a aprender inglés. El objetivo es que los niños se familiaricen con el idioma de forma lúdica y sin presión.

Incluye vocabulario básico, frases sencillas y estructuras gramaticales muy elementales. A nivel europeo, equivale aproximadamente a un pre-A1 en el Marco Común Europeo de Referencia (MCER).

Los niños aprenden a comprender y usar palabras y expresiones cotidianas, seguir instrucciones simples y participar en pequeñas conversaciones sobre temas conocidos como los colores, los animales, la familia o los juguetes.

Movers

Este es el segundo nivel y supone un paso adelante en la comprensión y producción del inglés. 

En Movers se introduce un vocabulario más amplio, se trabaja con tiempos verbales como el pasado simple, y los niños aprenden a escribir frases completas, leer pequeños textos y desenvolverse en situaciones un poco más complejas.

Corresponde a un nivel A1 del MCER. Aquí los alumnos ya pueden describir rutinas diarias, hablar sobre actividades del tiempo libre, contar pequeñas historias y entender mensajes más elaborados.

Flyers

Flyers es el nivel más alto dentro de los Young Learners. Representa el cierre de esta etapa y la puerta de entrada hacia exámenes como el A2 Key for Schools (KET).

Se corresponde con un nivel A2 en el MCER. A este nivel, los niños pueden mantener conversaciones más fluidas, escribir pequeños textos o comprender descripciones detalladas y leer textos más extensos.

También se les anima a usar conectores, verbos en diferentes tiempos y expresarse con más naturalidad tanto oralmente como por escrito. Es un gran paso que les da una preparación muy sólida para los siguientes retos.

¿Por qué es una buena idea para los niños?

A muchos padres les preocupa si sus hijos se van a agobiar o si es demasiado pronto para introducirlos en este tipo de pruebas. Pero lo cierto es que los Cambridge Young Learners están diseñados para que no lo vivan como una obligación. 

Los exámenes están llenos de actividades lúdicas, ejercicios con imágenes y temas cercanos al mundo infantil. No se sienten como un examen tradicional, sino más bien como un reto divertido. 

Otra ventaja es que familiariza a los alumnos con el formato de examen de Cambridge desde edades tempranas. De este modo, si más adelante quieren presentarse a exámenes como el B1 Preliminary (PET), B2 First (FCE) o incluso C1 Advanced (CAE), lo harán con mayor seguridad y experiencia.

¿Cómo puede ayudarte una academia de inglés?

Preparar un examen YLE no significa estudiar sin parar o memorizar listas de vocabulario. Lo más efectivo es aprender en un entorno donde el inglés se viva de forma natural y dinámica. Ahí es donde entra el papel de una academia especializada.

En Costa de Valencia Centro de Formación en Idiomas, los niños aprenden a través del juego, canciones, proyectos, cuentos y conversaciones adaptadas a su nivel. El enfoque comunicativo permite que los alumnos se expresen, escuchen, lean y escriban sin miedo al error. Y poco a poco, se van preparando para enfrentarse al examen sin apenas darse cuenta.

Además, nuestros profesores bilingües y especializados en preparación de los exámenes de Cambridge conocen el formato y las técnicas más efectivas para ayudar a los niños a llegar con seguridad al día del examen. Se trabaja tanto la parte emocional (gestión de nervios, confianza…) como la académica, siempre respetando el ritmo de cada alumno.

Costa de Valencia Centro de Formación en Idiomas

Aprender inglés puede ser un viaje agradable para los niños si lo enfocamos de la manera adecuada. Los exámenes Cambridge Young Learners son una excelente forma de motivar, medir el progreso y fomentar la confianza. 

No se trata solo de pasar un examen, sino de que el aprendizaje se realice de forma natural y con una evolución progresiva. Así, cuando llegue el momento de presentarse a un examen, el niño lo verá como una extensión lógica de lo que ya sabe hacer.

Además, gracias al acuerdo con Kensite somos Sede Examinadora de las pruebas oficiales de Cambridge, por lo que tu hijo se preparará y hará el examen con nosotros.

Si estás pensando en preparar a tu hijo para uno de estos exámenes o simplemente quieres que empiece a disfrutar del inglés de verdad, en nuestra academia estaremos encantados de ayudarle. ¿Quieres más información? ¡Contáctanos hoy y da el primer paso hacia un futuro bilingüe para tu hijo!

DIFERENCIAS ENTRE EL INGLÉS BRITÁNICO Y EL INGLÉS AMERICANO: ¿CUÁL DEBERÍAS APRENDER?

Cuando se habla de inglés, solemos pensar en un idioma universal, pero lo cierto es que existen variantes que han evolucionado de forma diferente con el tiempo. Las diferencias entre el inglés británico y el americano no son casualidad: tienen su origen en el pasado histórico de ambos países. 

Durante el siglo XVII, cuando los colonos ingleses llegaron a lo que hoy es Estados Unidos, llevaron consigo su idioma, pero con el paso de los siglos, las dos versiones del inglés tomaron caminos distintos. 

Los cambios lingüísticos en Estados Unidos se vieron influidos por su contacto con otras lenguas (como el español y las lenguas indígenas), mientras que en Reino Unido el idioma continuó evolucionando bajo otros factores sociales y culturales. 

Como resultado, hoy encontramos diferencias en vocabulario, pronunciación y ortografía que, aunque no impiden la comunicación, sí hacen que ambas variantes tengan su propia personalidad.

Diferencias en el vocabulario

Una de las diferencias más notables entre el inglés británico y el americano es el vocabulario. Aunque los hablantes de ambas variantes pueden entenderse sin problema, hay palabras que cambian completamente dependiendo del lado del Atlántico donde te encuentres.

Ejemplos de vocabulario diferente:

  • Coche:
    • British English: Car
    • American English: Automobile o simplemente car, aunque también se usa truck para referirse a una camioneta.
  • Ascensor:
    • British English: Lift
    • American English: Elevator
  • Patatas fritas:
    • British English: Crisps (para las de bolsa) y chips (para las fritas tipo restaurante).
    • American English: Chips (para las de bolsa) y French fries (para las fritas).

Estos son solo algunos ejemplos, pero hay decenas de palabras que cambian de una variante a otra. Si vas a viajar o trabajar en un entorno específico (Reino Unido o Estados Unidos), te será útil familiarizarte con el vocabulario local.

Diferencias en la pronunciación

Otra diferencia clave está en la pronunciación. El inglés británico tiende a ser más formal y articulado, mientras que el americano suele ser más relajado y abierto.

Ejemplos prácticos:

  • La letra «R»:
    • En el inglés americano, la «R» se pronuncia de manera fuerte en palabras como car o mother.
    • En el inglés británico, especialmente en acentos del sur de Inglaterra, la «R» suele ser más suave o incluso muda cuando está al final de una palabra (por ejemplo, car suena más como cah).
  • La entonación:
    • Los británicos tienden a usar una entonación que sube y baja con más frecuencia, lo que puede dar la sensación de que hablan con más formalidad.
    • Los americanos mantienen un tono más plano y relajado.

Diferencias en la ortografía

Si te gusta escribir, también debes tener en cuenta que hay algunas diferencias ortográficas entre el inglés británico y el americano. Esto es importante si vas a redactar textos en inglés, como correos profesionales, currículums o informes.

Cambios ortográficos comunes:

  • Palabras terminadas en -our / -or:
    • British English: Colour, flavour, honour
    • American English: Color, flavor, honor
  • Palabras terminadas en -ise / -ize:
    • British English: Organise, realise, recognise
    • American English: Organize, realize, recognize
  • Dobles consonantes en verbos con sufijos:
    • British English: Travelling, cancelling
    • American English: Traveling, canceling

Estas diferencias pueden parecer pequeñas, pero marcan la diferencia si estás escribiendo un texto formal y quieres adaptarlo a una variante concreta.

Diferencias culturales y de expresiones

El idioma refleja la cultura, y esto también se nota en las expresiones idiomáticas. El inglés británico está lleno de idioms que pueden sonar extraños para un americano y viceversa.

Ejemplos de expresiones:

  • British English: «It’s not my cup of tea» (No es de mi agrado).
  • American English: «It’s not my thing» (No es lo mío).
  • British English: «I’m chuffed to bits» (Estoy muy contento).
  • American English: «I’m thrilled» (Estoy emocionado).

¿Cuál deberías aprender?

La elección entre inglés británico y americano depende de tus objetivos personales. Aquí tienes algunas recomendaciones:

  • Si quieres trabajar en Europa o estudiar en Reino Unido, te convendrá aprender inglés británico, ya que es la variante más utilizada en ese contexto.
  • Si tu meta es vivir en Estados Unidos, trabajar con empresas americanas o prepararte para el TOEFL, el inglés americano será más práctico.
  • Si simplemente quieres ser comprendido a nivel global, no te obsesiones con las diferencias. Ambos tipos de inglés son completamente válidos y comprensibles en cualquier parte del mundo.

Aprende el inglés que se adapte a ti en Costa de Valencia Centro de Formación en Idiomas

Lo más importante al aprender un idioma es la constancia y la motivación. No importa si eliges inglés británico o americano, lo esencial es que te sientas cómodo practicando y utilizando el idioma.

En nuestra academia de idiomas Costa de Valencia ofrecemos cursos de inglés para todas las edades. Y somos Sede Examinadora de Cambridge gracias al acuerdo con centro de estudios Kensite Te podrás preparar, inscribir y examinar con nosotros. Además, nuestros profesores nativos te ayudarán a dominar el acento y las expresiones que prefieras. 

Para más información de nuestros cursos, escríbenos a info@costadevalencia.org o llámanos al 962 050 525.

¡Te esperamos!